Han pasado más de 3 mil años desde que Ender, el Genocida, destruyera la primera raza alienígena, los Insectores, y aunque salvara a la humanidad de su destrucción, cargará con el estigma de su crimen, liberando a los humanos, cual chivo expiatorio, de la parte de culpa que les corresponde. Son tres siglos también desde que se escribiera la Reina Colmena y el Hegemón, donde se explica quiénes eran los Insectores, la raza que casi destruye a la humanidad.
De las enseñanzas de ese libro surgen un grupo de hombres llamados los Portavoces de los muertos que, siguiendo los principios filosóficos del texto de la Reina colmena, viajan por los Cien mundos hablando en nombre de los muertos, como una especie de sacerdotes para quienes no creen en ningún dios pero sí en los valores de los seres humanos.
Los portavoces pronuncian discursos tras la muerte de un individuo intentando hablar por ellos y calmar el mal que las acciones realizadas durante su vida pudieran haber causado en la comunidad. Este movimiento surge como consecuencia del exterminio de los insectores por Ender en la batalla final, conocida como el Juego de Ender, lo cual transforma el odio inicial contra esta raza, a una enorme pena y culpabilidad de la humanidad al haberla exterminado.
Ender, quien se considera responsable último del exterminio, se ve a sí mismo como portador de la mayor culpa, y por ello se esfuerza en hablar a favor de aquellos que difícilmente pueden aspirar al perdón (asesinos, por ejemplo). En la novela, los Portavoces de los Muertos son considerados como el equivalente de un clérigo o sacerdote de una religión tradicional.
Ahora, desde el planeta llamado Lusitania se ha pedido a uno de ellos para que hable en el nombre de un Xenólogo que ha muerto misteriosamente a manos de la tercera raza inteligente, los Cerdis. Y en el transcurso del viaje del planeta Trondheim, donde vive el más cercano Portavoz, se ha producido otra muerte. ¿Qué está pasando en la Colonia Lusitania? ¿Quién es este hombre que tan sólo al llegar pone de cabeza a esta sociedad? ¿Qué secretos viajan con él?
Ésta es la continuacion de la saga de El Juego de Ender, de Orson Scott Card: La voz de los muertos, publicada por ediciones B, en su interesante colección de Ciencia ficción. El autor, nacido en Washington en 1951, ha escrito numerosas novelas y diversas sagas como la El Retorno, Ender y, El Hacedor.
El texto que hoy nos ocupa es ganadora de los premios Nebula (1986) y Hugo (1987), algo así como el Nobel de la Ciencia ficcion y la fantasía, y es considerada, junto con el Juego de Ender, una de las novelas de este género más influyentes de los años 80.
La voz de los muertos y sus dos secuelas Ender el Xenocida e Hijos de la mente tienen un carácter más filosófico a diferencia de El Juego de Ender, que es una novela de corte épico y tratan de las difíciles relaciones entre los humanos y los Cerdis o Pequeninos (en portugués), y de los intentos de Ender por evitar que suceda otro xenocidio (después del que involuntariamente cometiera en las Guerras Insectoras).
El texto puede verse como un ejercicio antropológico: la labor y el compromiso que estos profesionales adquieren al entrar en contacto con sociedades distintas y la lucha por no “contaminarlas” con las ideas y tecnologías que les son ajenas. En fin, es un texto interesante, muy distinto a su predecesor y que en su momento, no le gustó a los fanáticos de Ender, pero que se ganó el aplauso unánime de la crítica por la profundidad del su discurso, demostrando que el autor aún tenía mucho que ofrecer a sus lectores. Servidos.
Foto: Elena Ariadna Cantarell |
Cómo leer la Saga de Ender (orden cronológico)
Earth Unaware (Precuela)
Earth Afire
First Meetings
El juego de Ender
La sombra de Ender
Guerra de regalos
La sombra del Hegemón
Marionetas de la Sombra
La sombra del Gigante
Ender en el exilio
La voz de los muertos
Sombras en fuga
Ender el Xenocida
Hijos de la Mente
Shadows Alive (No disponible en español)
Scott Card, Orson, La voz de los muertos, Ediciones B, España, 527 pp., 2014. Traducción de Rafael Marín Trechera. Colección Nova.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario